5 mar 2014

Remedios caseros para la Gripe

Curar la Gripe primeros Pasos


Todos conocemos los sentimientos terribles de ardor de garganta, dolor de cabeza, cuerpo cortado y congestión nasal que señalan que vendrá algo terrible: una fuerte gripa. La época de catarros ha comenzado (y también la de su contagio masivo) y siempre parece que te golpea cuando estás tan ocupado que no puedes permitirte siquiera tomar un día libre. 

Aunque no existe una cura para el resfriado común, eso no significa que te des por vencido. Te compartimos cinco pasos para detener los efectos de la gripa en cuanto se presenten los primeros síntomas:




Mantente hidratado

La hidratación previene que la mucosa se haga demasiado gruesa y difícil de eliminar y es importante para la función corporal en general. Una gripa acompañada de fiebre puede causar deshidratación, reduciendo la habilidad de tu cuerpo para batallar contra la enfermedad. 

Conserva despejadas las fosas nasales

La congestión nasal es la principal afectación de la gripa común. Una solución salina puede ayudarte a respirar mejor, rompiendo la mucosa y manteniendo las fosas nasales limpias. Asimismo, el vapor generado en un baño caliente también puede proveerte un beneficio similar, permitiendo que las fosas nasales estén humectadas. 

Haz gárgaras

Hacer gárgaras con agua salada para clarificar una garganta con molestias puede sonar bastante antiguo, pero es parcialmente correcto. Hacer gárgaras en general es algo bueno, sin embargo realmente no importa con qué ingredientes las hagas (agua con sal, bicarbonato, Listerine, etcétera). Lo importante es limpiar las bacterias que se acumulan en el fondo de la garganta.

Bebe fluidos tibios

Beber líquidos tibios no sólo se siente reconfortante, sino también incrementa el flujo sanguíneo y mejora tu sistema de defensa natural,  de manera que podrás batallar mejor a las enfermedades respiratorias. 

Descansa

Evita aquellas actividades que inhiben a tu cuerpo de batallar los virus. Si te ejercitas normalmente, no necesitas renunciar a ello cuando sientas los primeros síntomas de gripa, pero sí es recomendable disminuir la intensidad del ejercicio. Aunque el dolor de garganta, la congestión nasal y otros síntomas arriba del cuello no afectan el ejercicio, si experimentas molestias debajo del cuello como deficiencia respiratoria, lo mejor es detener la rutina de ejercicio, para darle a tu cuerpo la oportunidad de recuperarse.

Remedios caseros para curar la gripe

El jengibre es uno de los más efectivos remedios para la gripe y los dolores musculares, también ayuda a aliviar el catarro. Rallar su raíz seca, añadir el zumo de medio limón y preparar un té común.

Inhalar vapor de eucalipto durante 10 minutos al menos dos veces al día, cubriendo la cabeza con una toalla frente a una cacerola hirviendo.

Beber sopa de pollo con cebolla y ajo, porque permite descongestionar las vías respiratorias.

Beber té de sauco, porque atenúa los síntomas. Simplemente se necesita una cucharada de bayas de sauco por taza de agua hirviendo. Dejar descansar y consumir hasta tres veces al día.

Preparar un zumo con 150 gramos de repollo y 150 gramos de naranja. Se licuan ambos y se beben al menos dos veces diarias.

Para la congestión nasal, se puede oler un ajo triturado envuelto en un pañuelo o gasa.

El té de miel o propoleo también es muy bueno, no sólo para el resfrío sino para el dolor de garganta.
Jarabe de cebolla: en un recipiente de barro colocar una cebolla grande picada, dos vasos de vino blanco, dejar macerar 24 horas, colar,, añadir miel y guardar en un frasco de vidrio. Tomar medio vasito en ayunas, a media mañana, a la tarde y antes de dormir. Seguir este tratamiento una semana.



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